Tiene como propósito responder a la misión que Dios mismo le ha encomendado al hombre: La defensa y protección de toda la creación (seres vivos, naturaleza etc.) de la cual el ser humano y en concreto los creyentes, somos responsables.
El PAPA FRANCISCO DICE: “Es fuente de serenidad y de paz y hace del cristiano un gozoso testigo de Dios, en las huellas de San Francisco de Asís y otros muchos santos que supieron alabar y cantar su amor a través de la contemplación de la creación. Al mismo tiempo, sin embargo, el don de la ciencia nos ayuda a no caer en algunas actitudes excesivas o equivocadas, empezando por el peligro de considerarnos dueños de la creación. Custodiar la creación, no es adueñarse de la creación, es el regalo de Dios a nosotros, nosotros somos custodios de la creación, pero cuando nosotros explotamos la creación, destruimos el signo del AMOR DE DIOS, Destruir la creación es decir a Dios: no me gusta, esto no es bueno. ¿y que te gusta a ti? Me gusto a mí mismo: ¡este es el pecado¡ Han visto? La custodia de la creación es precisamente la custodia del don de Dios. Y también es decir al Señor: “Gracias, yo soy el dueño de la creación. Pero para hacerla seguir adelante yo no destruiré jamás tu don”. Y esta debe ser nuestra actitud con respecto a la creación. Custodiarla, porque ¡si nosotros destruimos la creación, la creación nos destuira”.
Las Parroquias que estan vinculadas con este hermoso proyecto son: San Pascual Bailón, San Wenceslao, San Luís de Tolosa, San Juan María Vianney y Santa María Mazzarello.