El camino discipular implica formación para el servicio de acompañar a las personas en su proceso de conversión. Nos alegramos por los 46 animadores de evangelización de las parroquias de la Vicaría que dedicando tiempo para estudiar, compartir y crecer recibieron su certificación como catequistas mistagogos de la fe.
Damos gracias a Dios por la vocación de los catequistas que respondiendo al llamado del Señor de manera constante se comprometieron con la formación a través de la ESPAC. Junto a sus párrocos y en sinodalidad eclesial son encargados de custodiar, alimentar y acompañar la memoria de la fe”.
